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CONDICIÓN

lunes, 24 de abril de 2023

Este articulo se centra en la idea de que los momentos históricos son parte de un proceso más amplio y, que al analizarlos desde una perspectiva, se pueden observar tendencias y direcciones en distintos ámbitos, como la biología, la historia y la situación social. Se utilizó la metáfora de los "tableros" para ilustrar estos distintos ámbitos y cómo influyen en la vida de las personas y en el planeta en general. El texto también destaca la importancia de comprender estos procesos para poder anticipar, atenuar y reforzar las consecuencias de las acciones humanas.


Diferenciación en la complementación

Se pueden ver a los años simplemente como una acumulación de tiempo y experiencias. Pero, también, como momentos de un proceso más largo y que tiene diferentes oportunidades, emplazamientos y ritmos. Estas dos ópticas, son aceptables, aunque se diferencian por una amplitud en el punto desde donde se mira y de una concepción que vincula, de una manera particular, a los acontecimientos.

Esta variación de la amplitud de la mirada, siempre fue una aspiración en distintas culturas, un factor de evaluación y de reflexión. También resultó un modo de salirse de situaciones “hipnóticas” tanto positivas como negativas. En definitiva, no ser “tomados” por la coyuntura y utilizar progresivamente el desplazamiento por los tiempos de conciencia (pasado, presente y futuro) con un interés integrador.

Aplicando esta idea de ver procesos, necesariamente vamos a interpretar situaciones, anécdotas y hechos que, puestos en un sistema mayor, pueden estar indicando algo o mostrando direcciones. Por esta razón es conveniente definir los “trazos” en el nivel de tendencias y no de significados cerrados.

A quien escribe sobre esto, le resulta gráfica, utilizar la metáfora de “tableros”, es decir, hay diferentes tableros en distintos planos en los que se pueden realizar “acciones” o movimiento de “fichas”, ésta es una manera de simplificar, si es que se puede, algo tan amplio. Por ejemplo: hay un tablero donde se desarrolla la biología, con sus propias leyes y tiempos. La naturaleza, la Historia, la situación social, la vida personal, etc. Todos estos tableros, condicionan a las personas, a las sociedades, al planeta… Influyen de diferentes modos y con diferentes tiempos, pero, allí están integrados en una suerte de estructura, que está en movimiento y no estática o encerrada en un texto.

Ciertamente hay muchísimos factores que condicionan la vida en el planeta, pero también hay muchos recursos creados para atenuar, contrarrestar o superar progresivamente todo esto.

¡Ahí se ve el proceso humano!

Los Tableros (segunda parte)

Ejemplificando el tema que estamos describiendo, como un recurso de análisis, no como una “realidad”. Podemos comenzar con el tablero de la biología, si bien es parte de la naturaleza, preferimos apartarlo por su relación tan inmediata con la conciencia humana, porque es en el cuerpo en que ella se desempeña…

Cada quien, nace en un cuerpo que no ha elegido y desde el comienzo se encuentra condicionado por él. Esta relación pasa por momentos de acuerdos, desacuerdos y es necesario “hacer algo” para que el vínculo sea progresivo.

Por más cosas que se crean, el cuerpo, tiene su plan y lo va desplegando a lo largo de la vida. Tiene sus necesidades, sus limitaciones y sus ciclos con independencia de la conciencia que transporta. Ciertamente cada vez más, se interviene en él, desde la conciencia y se van modificando, ralentizando o deteniendo procesos. Esto es posible, gracias a que, la conciencia humana, no comparte los mismos límites. Puede desplazarse en el tiempo y en el espacio, esto le permite rescatar pasados, prever futuros y seleccionar acciones en el presente.

Lo mundial (Tercera parte)

En cuanto al “tablero” de la Historia, se puede decir que es el ámbito mayor del tablero de la Situación Social. Ésta es como una fotografía o una muestra situacional del proceso más amplio al que llamamos Historia. Pues allí en la situación actual, del mundo, del país, etc. se están expresando pasados y también tendencias futuras más generales.

La importancia de la observación de estos tableros, radica en que todo esto constituye el medio social en el que se desarrolla nuestra vida. Los cambios que allí se verifican, llegarán de una manera u otra, a la cotidianidad de los pueblos. Ciertamente, no suceden cosas a una velocidad diaria o, más bien, no llegan sus efectos a cada hora, aunque claramente se está acelerando su presencia. Así, se van constelando situaciones, cambios, tensiones, etc. que se instalan en la atmósfera en que se vive…

Todo esto depende de muchas acciones humanas, aunque no se puedan prever todas las consecuencias, estos actos, sí tienen intenciones, persiguen objetivos. Para poner simplemente un ejemplo: hace más de una década el mundo islámico se caracterizaba mundialmente por las posturas extremistas. En la última década, comenzó a instalarse una visión diferente, el mundo árabe se diferenció y mostró otra cara para complementarse con el resto de las naciones. Quizás, imitando a otros ejemplos, se apoyaron en un deporte. Se podrá objetar que todo esto es por dinero, pero como se está tratando en este artículo, nada está aislado y aun la cortedad de un objetivo económico, si fuera el caso, no quedará sólo en ese campo.

En otro orden, luego de años de “globalización” y el ordenamiento de la producción por regiones o países. Pandemia mediante y otras crisis puntuales, algunos ven la necesidad de activar la producción y la industria en cada país. Este “nacionalismo” es una tendencia mundial, quizás como una reacción pendular a años de vaciamiento, desocupación, dependencia; a progresismos y neoliberalismos fallidos.

Por esto siempre diferenciamos la “globalización” de la “mundialización”, este último es un proceso interesante de cercanía y convergencia entre todos los pueblos y culturas del mundo. Aunque algunos poderosos le dieron un signo economicista, aquí se ve una tendencia Histórica que estos intentan usufructuar coyunturalmente. Por lo tanto, la globalización puede fracasar, pero la convergencia de los pueblos, seguirá pues es parte de un tablero mayor, ese tablero que trasciende a los individuos contemporáneos y que antes o después la Historia y las acciones humanas acomodará…

Nuevos límites y el futuro (cuarta parte)

Ante los cambios que han estado ocurriendo en los últimos años, nos enfrentamos a una mayor exigencia, al menos en general, para los “paisajes” en los que la mayoría de los habitantes del planeta nos hemos formado. Es un momento de máxima tensión para asimilar favorablemente tantos cambios.

Las cosas están sucediendo a gran velocidad y la "vibración" de los mecanismos mentales que deben acompañar todo esto está aumentando significativamente.

Citando algunos ejemplos de este “tablero”, la inteligencia artificial (IA), sumada a la física cuántica y su aplicación técnica, como computadoras super veloces y sensores super precisos, así como los nanorobots para atender enfermedades y nanosatélites, entre otros. Todo esto, nos presenta serios interrogantes: en aspectos laborales, sociales y sobre todo pone a prueba la necesidad de una nueva ética Es como una nueva frontera, un tanto oscura, donde se puede proyectar la imaginación con sus temores, pero también, con nuevas esperanzas.

En lugar de imaginar peligros o ventajas, vamos a recordar brevemente y a grandes zancadas la Historia. Tomaremos algunos hitos solo para ejemplificar.

Vamos a intentar ponernos en presencia del “interno Sí y del interno No” que rodeó a los grandes saltos del ser humano.

Primero fue el fuego y su manejo, con él se podía dañar, pero también recibir múltiples beneficios. Los metales que permitían armas más letales, pero también instrumentos más eficientes y duraderos.

La electricidad que mataba, pero también “iluminaba” nuestra vida. Los aviones, que permitían desplazamientos impensados, pero también el lanzamiento de bombas.

Cada uno de estos “saltos” y muchos otros, siempre plantearon interrogantes, aunque ahora ellos, son parte incuestionable de nuestra vida. Todos estos avances que nos aliviaron en muchos aspectos, van dando algo que se nos ha explicado como “plus”, es decir liberan energía en el ser humano que es aplicable a nuevos desafíos. Así que no hay razón para que no exista esperanza en estas nuevas posibilidades.

Es cierto que estos eventos tienen algo de "mecánico", ya que suceden. Pero también tienen mucho de intencional, de acciones humanas. Algunas de ellas proyectaron el "No", pero también hubo acciones de personas que querían lo mejor y que de algún modo, y quizás muy lentamente, fueron equilibrando las cosas hacia el "Sí", hacia lo mejor para todos.

Entonces, acompañar estos avances no se apoya en una esperanza ingenua, se trata de una elección fundamentada y libre…

Carta a sus amigos (Buscando el emplazamiento)

A principios de la década del 90, Silo nos enviaba unas “Cartas” a sus amigos que describían la situación mundial, social y las crisis que enfrentábamos las personas. Alguien podría suponer que, tratándose de una cuestión coyuntural, las ideas allí expuestas han perdido vigencia…

Repasando algunos acontecimientos del presente, uno se puede topar con artículos publicados en distintos portales, que hablan de la “moda” o resurgimiento de posturas relacionadas con las “escuelas morales de la decadencia”. Se habla de los estoicos y su postura ante las vicisitudes de la cotidianidad o del estilo de vida que propuso Epicúreo para enfrentar la “caída” de un mundo viejo o, más suavemente, a un cambio radical de éste...

Pues bien, en aquellas Cartas, esto ya estaba dicho hace más de 30 años. Quizás es una señal que nos muestra que algo nuevo está sucediendo, aunque no tengamos la intención de verlo. Es como decir: si ahora todos lo ven es porque ya no es actual y “lo nuevo” está hoy en embrión y todavía no nos es evidente.

En estos días y luego de un cierto furor, un grupo de notables propuso que se frene el lanzamiento de la “inteligencia artificial”, al menos por 6 meses. A fin de establecer algunas pautas o protocolos a su funcionamiento.

En las Cartas de Silo, se lee: “…El desarrollo científico y tecnológico no puede ser cuestionado por el hecho de que algunos adelantos hayan sido o sean utilizados en contra de la vida y el bienestar. En los casos en que se cuestiona a la tecnología se debería hacer una previa reflexión respecto a las características del sistema que utiliza el avance del saber con fines espurios…”

Entonces, hay que enfrentar primero las formas negativas que controlan la economía y la organización social. Hay que llevar hacía ahí las reflexiones, las críticas y las propuestas, pues, aunque se hagan extraordinarios protocolos, en principio la IA y todo lo nuevo, caerá en el mismo Sistema.

Como un emplazamiento acorde con los nuevos tiempos, se puede interpretar que, la "adaptación creciente" es ahora una prioridad, lo que implica la flexibilización mental, la búsqueda de momentos de "silencio" y el ajuste del vínculo que nos mantiene ligados a las mejores decisiones (como el palo de Ulises).

Finalmente, parece que son momentos de converger con otros desde la diversidad de cada cual, sin ocultar las propias convicciones, pero en convergencia, no en divergencia o en una diferenciación aislante. Lo que está en juego es más grande que las propias posturas y muchas de estas pueden ser complementarias, edificantes.

Este párrafo de la lección 6 (Perfeccionamiento atencional) del libro “Autoliberación” de LA Ammann, resume, a nuestro entender, la actitud básica que puede ayudar en estos momentos de mucho ruido, presiones y sensación de futuro incierto: “Una buena disposición para el aprendizaje, una buena memoria, un aumento de la permanencia en los propósitos y, en suma, el crecimiento de la capacidad de cambio, dependen de la atención.”

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