Cuando el futuro nos alcanza

Es común, más a determinada edad, que todo aquello que se proyectó o anheló ya está en el presente, bien para disfrutarlo o, en otros casos, para detenerse en su búsqueda pues ya pasó el interés por alcanzarlo o se comienza a creer que no será posible y se deja de lado esa aspiración. Aunque ésta sea la tendencia, siempre está, por supuesto, la posibilidad de renovarse en las búsquedas y en las aspiraciones...

Suele ser un factor dador de confianza, tener previsiones y anticipar lo que sucederá, un sentir que en algún momento da solvencia y cierta seguridad. Pero cuando eso comienza a suceder en el mundo, y ya lo que podía ser una anticipación, está en boca de todos y es actual, llegó a “la calle”, deja, por tanto, de ser un adelanto...

Todo esto no resulta una situación individual solamente, sino que un determinado momento histórico puede pasar por esa singular condición, de que lo anticipado ya es presente y el futuro se agota en cuanto a anticipaciones y se alcanza a proyectar sólo una continuación del “hoy” sin novedades y empeorando o algún retorno de momentos anteriores.

En esos tiempos, mantener un decir anticipado cuando ya dejó de serlo, puede ser un signo de “detenimiento”, personal, grupal o lo que fuere...

Por eso la afirmación “tenía razón” o “teníamos razón”, es una buena manera de afirmarse en el método empleado para anticiparse y dar vuelta la página para seguir adelante, tratando ahora de otear, si resulta posible, aquello que todavía no es. O bien comenzar a ejercer el oficio para el que, durante años, alguien se preparó.
Mostrar lo que sucederá puede ser necesario para comprender la importancia de adiestrase para algo que vendrá y cuando eso ya es presente, ejercer lo mejor posible esa preparación, pues no siempre es factible ver con claridad el futuro, hay épocas históricas donde esa posibilidad se limita sobre manera y es relevante ahí, ocuparse, de lo más necesario...

Si un grupo de personas se preparó para sortear una tormenta que estaba por venir, acumuló elementos, se dieron funciones diferentes, se fortaleció la construcción, etc. cuando esa previsión llega y, ya se está inmerso en el vendaval, hay que actuar...