El pedido

El mecanismo del pedido acompaña a la humanidad desde la remota antigüedad, cada cultura y cada época generó sus imágenes y así se fueron poblando los escenarios mentales con dioses, seres especiales, héroes, seres queridos, etc. A ellos se podía acudir a través de “pedidos” (oraciones, ceremonias, rezos, etc.). Siempre se resaltó que esa relación sea mantenida con “sincera unción” y así obtener respuestas de diferentes tipos. A veces bastaba sentir la presencia de algún "ser", a veces en los sueños se materializaban de muchas maneras, una suerte de susurro o al levantarse una ocurrencia, etc. etc.

Por qué no aceptar que muchos de esos pedidos, muchos de esos clamores se fueron integrando en los pensamientos cotidianos e inspirando direcciones y decisiones en la vida. También se puede aceptar que allí se imbricaron las respuestas que esos pedidos fueron recibiendo.

Ahora bien, cómo ponderar todo esto, porque todo lo hecho no fue acertado y si se mira hacia atrás en la Historia, existieron interesantes manifestaciones, pero también, violencias de diferentes tipos…
Entonces algún tipo de indicador o indicadores se podrían definir para identificar lo que viene de los pedidos y sus respuestas de lo que no…

En términos generales y por lo que se nos ha trasmitido, se puede afirmar que todo aquello que genere paz, alegría y fuerza en uno y hacia los demás es evolutivo y proviene del contacto con esos mundos inmateriales, que se traducen en el medio social con la bondad de la que se dispone...

Opuestamente, aquello que rompe, enjuicia, resiente, distancia, etc. Proviene de acá, de la materialidad de las propias tensiones internas, los propios temores y frustraciones, que también se traducen de múltiples maneras al mundo.

En síntesis, todos disponemos de ese mecanismo del "pedido", tenemos experiencia de no escuchar las respuestas y dejar que la avalancha de tensiones sea la que se expresa, pero también en medio de todo esto, tenemos el canal de contacto con esos "mundos" evolutivos disponible y podemos elegirlo cada vez con mayor frecuencia...