En momentos de “oscuridad” hay que resistir al hechizo de las “salidas” improvisadas. La actualidad tiene mucho de penumbra y buscar escapar de ella de cualquier manera, puede llevar a empeorar las situaciones...
Las respuestas compulsivas tienen una aparente velocidad, sin embargo las respuestas meditadas tienen mayor continuidad en el tiempo.
Cuando hay un horizonte claro que da dirección y en el camino aparecen situaciones no previstas, es necesario ir respondiendo de nuevas maneras a los desafíos, pero esto no es lo mismo, a que la dirección más importante sea la improvisación.
A veces es necesario, el diálogo, la lectura y la reflexión para resistir a la improvisación en las cosas esenciales y en esa aparente “postergación”, en realidad, se avanzará mejor...
No es igual, que en el camino sea necesario improvisar a que, el camino sea la improvisación.
(Reflexión hecha durante la lectura del libro “La Mirada Interna” de Silo)
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