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Bitácora

lunes, 21 de octubre de 2013


Sin conocimientos técnicos  como los actuales, en las cuevas de Altamira, Chauvet y seguramente en tantos otros lugares, hay rastros que traducen experiencias y visiones compartidas en un momento de la cultura humana.
Aun hoy podemos conectar con esa identidad y penetrar, a pesar de sus rústicos trazos, a destellos en lo que podemos interpretar como búsqueda del espíritu.

En este contexto son como escritos en la bitácora humana, que más allá de las interpretaciones científicas que se les va dando a aquellos testimonios, cada cual puede conectar con ellos y sacar sus propias conclusiones…

El titulo de este escrito, se refiere al cuaderno que se guardaba en la bitácora de los barcos para su protección, básicamente del clima. En sus páginas, el tripulante iba haciendo anotaciones útiles a las actividades de navegación.

Actualmente, su definición fue más allá de su ámbito original y hace referencia, ampliamente, a un cuaderno o libreta donde cronológicamente se van haciendo anotaciones, útiles para los intereses de quien la utiliza. Es obviamente, en este último sentido que tomo el término.

“Aprender sin límite” Nos propone Silo en el libro "El Paisaje Interno".

¿Cómo puede ser que a veces crea, aunque no lo exprese, que "me las sé todas”? Poniéndome un límite tan pequeño, tan parcial, tan infinitesimal. Habiendo tantísimo que no sé del mundo!!!

En los momentos que creo eso, es como si viera el mundo a través de un fideo y ni siquiera un mostachol o penne, algo más estrecho aún…

¡Ojala que todos los días me disponga a aprender algo nuevo!

Creo que la bitácora es esencial en este propósito. Qué testimonio tengo, si sólo me apoyo en la memoria? Si no recuerdo con detalle en que andaba uno hace un año, o más tiempo, o hace quince días... O bien recuerdo detalles sin mayor importancia… O lo hago condicionado por el estado de ánimo desde el cual estoy recordando.

Depende de donde comience a recordar y a veces parece que fue de un modo o de otro. En tanto si lo voy escribiendo  es un dato algo más neutro del pasado. Permite cotejar momentos, auxiliando a la memoria y a los variables estados de ánimo y situaciones por las que voy atravesando.

Es un gran apoyo para hacer cotejos de momentos, pudiendo rescatar así la real dimensión de las comparaciones y que estas no queden libradas a los estados de ánimo de la situación.

Releer bitácoras me introduce en otro espacio más allá del cotidiano, ayuda a tener mayor amplitud y a veces “devuelven” lo que allí se reflejó en su momento.

Llevar un "registro", puede ser una buena herramienta para que el náufrago se convierta en navegante...

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